General, Social Media

La motivación, clave para que los empleados compartan los contenidos en las redes sociales

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En Internet todo cuenta. Las redes sociales se han convertido en uno de los puntos más fuertes de la estrategia de marketing de las empresas, que realizan importantes inversiones para generar contenidos de calidad con los que alimentar sus perfiles sociales.

Es indispensable conocer de qué forma maximizar el impacto de ese contenido vertido por una marca, pero muchas compañías se olvidan de tener en cuenta también otros contenidos, los que publican sus propios empleados en las redes sociales, y a los que también podrían sacarles partido de manera indirecta.

No se puede obligar a los empleados a compartir contenidos, sino a motivarles para que lo hagan

Utilizar las redes sociales de los empleados de una marca para publicitarla puede parecer, a priori, peligroso. No se trata de obligar a los empleados a que compartan los contenidos que han publicado las cuentas corporativas de la compañía en sus perfiles personales amenazándoles con el despido, ni mucho menos.

La idea es crear un marco favorable y motivar a los empleados de forma sencilla y sin obligarles a compartir el contenido. Pero si lo hacen, de forma natural, esto repercutirá positivamente en la imagen de la empresa.

Para ello es necesario, por una parte, contar con una buena estrategia de contenidos. Si creamos contenidos interesantes, el propio empleado estará orgulloso de mostrárselos a sus amigos. Nadie le obliga, lo hace porque está contento con su cultura empresarial y con lo que hace su compañía en las redes. Pero lograr esto no es fácil, es necesario crear buenos contenidos que aporten valor.

También se puede apelar a la motivación del empleado, lo que requiere destinar recursos económicos y de tiempo a llevarla a cabo y no todas las empresas están dispuestas a invertir en esto. En este sentido, se pueden utilizar las redes sociales para mejorar la unidad de los equipos de trabajo.

No solo se deben organizar eventos de teambuilding o días fuera de la oficina, sino que se pueden dar incentivos a quienes compartan la mejor fotografía o muestren el lugar de trabajo por Instagram Stories, a quienes hagan una foto de su puesto de trabajo… También se les puede permitir a los empleados probar un nuevo producto de forma conjunta para que puedan compartirlo antes que nadie en sus propias redes… Con esto, se genera contenido que puede utilizarse en las cuentas de la propia empresa y que, además, aporta credibilidad y valor.

Además, el empleado, con la tendencia creciente a narrar la vida diaria en las redes sociales, es posible que un día mencione un problema que atañe a la empresa o se queje de algo relacionado con su empleo. Esto es un arma de doble filo, y posiblemente no debiera hacerlo de forma pública en sus perfiles apelando al sentido común.

De todas maneras, si no existen reglas en la compañía sobre lo que los empleados pueden o deben compartir en las redes sociales en referencia a la empresa, puede ser una buena estrategia que la cuenta corporativa actúe rápido y trate de convertir ese comentario negativo en uno positivo también dará una imagen a los contactos del empleado: La empresa cuida a sus trabajadores, valora su esfuerzo y trata de mejorar.

Fuente: http://www.trecebits.com/